Los beneficios del anís para la salud

Su sabor es inconfundible y también lo es su aroma. Cuenta con excelentes propiedades digestivas y también para aliviar todo tipo de molestias estomacales. Existen diversas variedades de anís y desde la antigüedad la planta ha sido utilizada como planta medicinal, como especia y como alimento.  Además de alimento, se ha utilizado para muchas aplicaciones medicinales como mejorar la digestión, o para abrir el apetito.

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¿Cuál es el principio activo de la planta?

El anís, especialmente los frutos, contienen un aceite esencial muy rico en anetol, un principio  con propiedades digestivas, carnitivas, expectorantes, antisépticas y espasmolíticas.

El uso medicinal más importante del anís

El anís tiene propiedades muy útiles para el aparato digestivo: El anís tiene propiedades carnitivas (favorece la disminución de la generación de gases en el tubo digestivo), estomacales, antiespasmódicas (ayuda a tratar los espasmos musculares) y sedantes (provoca sueño o calma).

El anís para problemas digestivos

Aerofagia: Muchos componentes del anís, especialmente el anetol, le proporcionan propiedades carnitivas, por lo que las preparaciones de estos frutos, como las infusiones o como parte de los ingredientes en la receta, serán útiles para expulsar el exceso de gases acumulados en el aparato digestivo.

Flatulencia: Las flaulencias o ventosidades son el resultado del exceso de gases en el aparato digestivo, que pueden causar el vientre hinchado. Una manera muy útil de combatir los gases es utilizar los frutos de esta planta. El anís es uno de los mejores carnitivos, capaz de forzar la expulsión del exceso de gases acumulado en el intestino y disminuir la producción de los mismos, lo que ayuda a reducir la hinchazón abdominal.

El anís para problemas estomacales

Gastritis: El anís contiene más de 20 componentes antiespasmódicos y casi la mitad sedantes. Estos principios le otorgan la capacidad de evitar muchos de los problemas de “nervios de estomago”, como la gastritis nerviosa (dislepsia nerviosa).

Acidez estomacal: El anís puede ayudar a reducir la acidez producida por la gastritis.

Digestiones pesadas: Su contenido de anetol le proporciona propiedades digestivas. El bisolobeno también presenta propiedades estomacales. Ambas ayudan al estomago a digerir los alimentos.

Propiedades medicinales digestivas del anís

Dolor de estomago y cólico abdominal: Sus propiedades le otorgan la capacidad de reducir muchos de los problemas que afectan al estomago y a los intestinos. Es muy indicado para el tratamiento del dolor de estomago o vientre.

Falta de apetito: El anís estimula la digestión consiguiendo abrir el apetito, siendo muy recomendable en casos de inapetencia o anorexia.

 Propiedades medicinales del aparato respiratorio

El anís también posee propiedades expectorantes debidas principalmente a su contenido a anetol, timol y terpineol. Además es una la planta que contiene más principios antiinflamatorios y es un buen antitusivo, lo que permite a los pulmones expulsar las secreciones producidas por los bronquios y disminuir la tos. Es muy indicado también para el tratamiento de resfríos, bronquitis asma, calmar los nervios y los cólicos menstruales.

Valor nutricional – Composición del anís

Cultivos

Anís tradicional

Pimpinella anisum es el nombre científico que lleva el más tradicional de los anises. Su origen es egipcio pero se lo emplea en todas partes del mundo indistintamente. Sus semillas son pequeñas.

Anís estrellado

Lleva por nombre científico el de Illicium Verum. Pertenece a una familia botánica diferente a la del anís común, sin embargo contienen el mismo principio activo, concretamente una esencia rica en anetol. Sus propiedades son muy similares, ambos facilitan la digestión y poseen propiedades carminativas, es decir, favorecen la eliminación de los gases y las flatulencias intestinales, por lo que su consumo se indicaba para personas con problemas de digestiones pesadas y gases. No obstante, es el anetol, el componente que ingerido a dosis elevadas puede tener efectos tóxicos sobre el sistema nervioso provocando delirios y convulsiones. Como consecuencia de la detección de varios casos de intoxicación grave asociados a la administración de la infusión sobre todo en bebés en los que el anís estrellado parecía aliviar los síntomas de los cólicos del lactante, motivo por el cuál el Ministerio de Sanidad y Consumo de España decidió retirar el anís estrellado del mercado en octubre de 2001.

Anís japonés

Illicium anisatum es el nombre que lleva el anís japonés, el que no debe ser consumido bajo ningún punto de vista. Este anís, también llamado badana de Japón, es sumamente tóxico y puede generar problemas en el sistema digestivo y urinario, además del sistema nervioso central. Su uso es únicamente aromático, puesto que se emplea como sahumerio.

Anís de Florencia

Se trata del hinojo. El anís de Florencia es nuestro viejo y querido amigo con forma de bulbo y con ese sabor tan intenso que, por supuesto, te recuerda al anís. Claro está: se trata de uno de la familia, tanto el fruto como las semillas. Lo bueno es que puedes comerlo fresco, horneado, en ensalada y seguirás gozando de sus grandiosas propiedades digestivas, comunes a todo su grupo familia.

La información proporcionada en este sitio sirve para apoyar y no para reemplazar la relación entre un paciente y su médico o nutricionista.

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