El plan de alimentación para la diabetes

En cuanto al papel de la alimentación en esta patología crónica, se sabe que una dieta equilibrada juega un factor clave respecto a su prevención. Pero además, en la persona ya diabética, la dieta es uno de los pilares fundamentales del tratamiento, ya que colabora en la regulación de los niveles de azúcar en la sangre y previene posibles complicaciones a corto (hiperglucemias e hipoglucemias) y a largo plazo, en ocasiones junto con la administración de insulina (tipo I) y en otras, junto con la toma de ciertos medicamentos llamados antidiabéticos orales (A.O.), aunque estos no son necesarios en todos los casos (tipo II).

Dieta para la diabetes – Factores claves

En general, lo más importante a tener en cuenta en la parte nutricional es llevar una dieta individualizada, variada y equilibrada.  Rica en fibra (verduras, frutos secos, cereales integrales y fruta en las cantidades adecuadas para cada caso). Pobre en grasas saturadas y colesterol (moderar el consumo de lácteos enteros y los muy grasos, carnes grasas, huevos y sus derivados, embutidos, vísceras, etc), como prevención a largo plazo de enfermedades cardiovasculares. Puede permitirse un consumo esporádico y controlado de alimentos que contienen hidratos de carbono sencillos, siempre y cuando se tomen junto con otros ricos en fibra o proteínas, lo que reduce su velocidad de absorción.

Los alimentos limitados o restringidos  en caso de diabetes

Aquí una lista de alimentos permitidos de consumo moderado y ocasional:

Veamos los alimentos limitados en la dieta de los diabéticos, es decir, aquellos que sólo deben consumir ocasionalmente y de acuerdo al nivel de glucosa.

En general, los puntos más importantes a tener en cuenta son los siguientes:

• Reducir las grasas saturadas y colesterol (moderar el consumo de lácteos enteros y los muy grasos, carnes grasas, huevos y sus derivados, embutidos y vísceras), como prevención a largo plazo de enfermedades cardiovasculares.
• Controlar alimentos que contienen hidratos de carbono simples (azúcar, miel, mermelada, bebidas azucaradas, golosinas, chocolate y derivados…) y complejos (cereales, papas, menestras).
• Se recomienda sustituir el azúcar o la miel por edulcorantes no nutritivos, ya que además de que no aumentan los niveles de azúcar en la sangre, no aportan calorías, lo que es beneficioso para quienes tienen sobrepeso u obesidad. La diabetes está directamente relacionada con la alimentación, ya que si consumimos alimentos ricos en carbohidratos, la glucosa sube, es por esto que parte del tratamiento es una dieta libre de carbohidratos.

La información proporcionada en este sitio sirve para apoyar y no para reemplazar la relación entre un paciente y su médico o nutricionista.

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Fuentes de referencia: Medline Plus, Eroski